TRAMA URBANA Y PAISAJE MEDIEVAL
Senés se menciona en el siglo XII por la abundancia y calidad de su seda y muestra como la conquista musulmana a principios del siglo VIII fue muy rápida y dejará una profunda huella en el territorio con la instalación de grupos bereberes norteafricanos, ocupación que marcará la toponimia de los pueblos y sus elementos topográficos.
Se crearán espacios agrarios andalusíes, basados en el control de la escasa agua disponible y la creación de sistemas de huertos escalonados en terrazas, según modelos del Norte de África. Acequias, norias, aljibes, fuentes... formarán parte de un paisaje irrigado que mima los viñedos para pasa, las higueras, los granados, las moreras para gusanos de seda..., además de una fecunda horticultura. La ganadería tendrá una gran importancia en el Campo de Tabernas como invernadero de ganados trashumantes granadinos, lo que se constata en una serie de aljibes ganaderos medievales.
Vista general de Senés. © Fotografía: Alfonso Ruiz
El caserío antiguo muestra una arquitectura tradicional definida por viviendas de volúmenes puros, pequeños vanos, muros de mampostería de pizarra sin revocar, cubiertas sostenidas sobre rollizos de madera y una capa de cañizo, y encima grandes aleros de pizarra, alguna esquina redondeada y solana o cámara en la planta alta como elemento distintivo externo, todo ello con una preferible orientación al Sur. La planta baja suele servir para los animales (mula, cerdo y gallina), fundamentales para la vida, y arriba la vivienda propiamente dicha.
El paisaje cultural que nos domina diferencia dos zonas. Encima del pueblo destaca el aterrazamiento del secano cortando la pendiente de la montaña, los corrales de ganado y un paisaje abrupto formando fondos escénicos con las crestas de pizarra y profundos barrancos.
En el propio núcleo urbano reconocemos pequeñas vegas aterrazadas, con espacios irrigados gracias a elementos de tecnología hidráulica de origen hispanomusulmán (balsas, acequias, fuentes, norias, partidores…), eras enlosadas y un urbanismo escalonado en el núcleo urbano de disposición rectangular, situado por encima de la línea del regadío, destacando los callejones o huecos entre las casas para salida de las aguas en caso de lluvias torrenciales y para iluminar las habitaciones.
Reconstrucción idealizada del antiguo poblamiento islámico dominado por el castillo, en contraste, a la derecha, con el caserío actual, donde prácticamente ha desaparecido ese recinto defensivo y sobrevive la arquitectura de la pizarra.
La imagen actual del municipio es atrayente, con un caserío denso y blanco, con volúmenes cúbicos rematados por cubiertas planas y presidido por el volumen de la iglesia.